¿Por qué el árbol queda sin hojas en Otoño?
En otoño, las hojas caen como parte de un proceso vital para la supervivencia de los árboles. Este fenómeno natural les permite prepararse para el frío del invierno.
Durante la primavera y el verano, los árboles aprovechan los brillantes rayos de sol, así como el aire y el agua, para producir savia, su principal fuente de alimento. Esta savia circula por las ramas, hojas y tronco, nutriendo al árbol. En Otoño el sol brilla menos el árbol tiene menos alimento para sobrevivir.
Sin embargo, a medida que los días se acortan y las temperaturas descienden en otoño, los árboles ajustan su metabolismo. Las células en la base de los tallos de las hojas comienzan a debilitarse, formando una capa de corteza llamada abscisión.
Esta capa bloquea el flujo de nutrientes hacia la hoja, lo que eventualmente resulta en su caída.
Este proceso permite a los árboles conservar energía y nutrientes durante el invierno, cuando las condiciones para la fotosíntesis son menos favorables.
Además, las hojas caídas cumplen una función importante al proporcionar nutrientes a la tierra a medida que se descomponen, enriqueciendo así el suelo y preparándolo para el crecimiento futuro de las plantas.
En resumen, la caída de las hojas en otoño no solo es un síntoma del cambio de estación, sino también un mecanismo crucial para la supervivencia y el ciclo vital de los árboles.